jueves, 27 de noviembre de 2008

COMO UN NIÑO CON...


Magnifica Soria, Avila, la conozco, realmente una maravilla de nuestra castilla, pero amigos mios, os pido permiso para hablar de mi tierra, es curioso, pero cuando llego a ella, me parece que haya vivido toda la vida en ella, el acento me transporta a viejos recuerdos algunos de ellos muy arralados a mi, si colegas...mi padre, el no dejo nunca de ser de su tierra y el me hizo sentir devoción y hasta amor ella, en ocasiones pienso que son tonterías, pero no, no lo son, en ella vivió mi abuelo, que se lo llevaron las disputas entre unos y otros...se ve que era un poco rojo..."jodo", rojo y maño, realmente explosivo. No lo conocí, a la que si conocí y no me acuerdo fue a mi abuela, claro yo tenia meses cuando decidió reunirse con el rojo...

Muchos veranos híbamos al pueblo, toda una odisea, en tren toda la noche y unas dos horitas de carro tirado por un mulo hasta el lugar, yo encantado, mi madre molida, mientras mi padre ponía al día a su hermano, todas las barbaridades que ocurrían en la gran ciudad.

Comparar amigos, salimos el otro día a las 19,00 h. de la tarde, de casa y por que paramos a cenar, sino en tres horas nos plantamos en mi tierra...Huesca (ARAGON)...que pasa pués, maño!!!

He de deciros que ya no me queda nadie, mi familia por parte de padre, era de una generación muy trabajada, hombres del campo muy erosionados por el crudo invierno y muy agrietados por el sofocante calor, trabajando la tierra y pastoreando animales para arriba y para abajo...Pero si que puedo decir por el poco tiempo que les conocí...Gente sana, muy ignorantes, generosos hasta la torpeza, brutos y tozudos sin medida, pero gran representantes de la tan escrita NOBLEZA BATURRA.

Espero y deseo que os gustaran las montañas, las nieves, las ermitas y castillos...entre ellos nací y sabéis, no quiero olvidarlo.

Disculpar la panzada de kilometros, pero aún así nos queda mucho por ver.

Ah! por cierto.

Gracias.
Nota: Juani y Javier...Hos hechamos a faltar, yo creo que cada cinco minutos.

1 comentario:

José María dijo...

Es cierto; la tierra donde se vino al mundo siempre está arraigada en lo más hondo. No quieras saber tú lo que yo hago cuando entro en Castilla-León y cuando leo provincia de Ávila, ni te cuento.
Fue "guapo" el periplo que hicimos por Huesca; muchos Km, ciertamente, pero lo mucho que vimos no nos lo quita nadie. ¡Ah! y lo que comimos. ¡Vaya huevos los de Castiello de Jaca! Y el chuletón de Biescas ¿qué?. Pero como he dicho muchas veces, lo que más vale es la amistad y la camaradería que nos profesamos los miembros de la "Cuchipandi".
Un abrazo.